


Aunque este monasterio fué reconstruido en el siglo XI, sus orígenes se remontan a los tiempos de los visigodos. Estilísticamente es una conjunción de detalles lombardos con otros más propios de Aragón e incluso alguno novedoso por estas tierras.
Valor añadido es su entorno, encajonado entre crestas aledañas al valle por el que transcurre el río Noguera Ribagorzana, y en la proximidad del congosto de Les Escales.
Enlazad AQUÍ y tendreis más información e imágenes.